Los contenedores vacíos se acumulan en China producto de la disminución de la demanda comprometiendo las exportaciones y la recuperación económica.
Se habla de la economía global en recuperación, pero el panorama que se ve en los puertos de Shanghái, Ningbo y Shenzhen acumulando contenedores vacíos en espera de carga es desalentador. Según el South China Morning Post, hay una caída de 18% este año en un índice de tarifas de fletes de 15 rutas marítimas, siendo un acumulado de 82% desde enero de 2022, de acuerdo a lo que indica el Shanghái Shipping Exchange.
El puerto de Yangshan de Shanghái, uno de los más activos, tuvo que alquilar espacio al puert de Taicang para poder aparcar contenedores vacíos, mientras que trabajadores del puerto duplican sus tiempos de descanso por falta de movimiento.
Una de las consecuencias de la acumulación de contenedores en los puertos chinos va más allá del problema de espacio y la falta de movimiento de estos, sino que trae consecuencias en los valores de las acciones de las compañías chinas.
Es por esto, que la depreciación bursátil de las navieras y operadores portuarios chinos es preocupante, y amenaza la recuperación económica.
Si bien, hay empresas que han marcado un buen desempeño, esto se ve envuelto en medio de una contracción en las exportaciones chinas, que sufrieron una disminución del 6,8% en el periodo de enero-febrero, respecto al año anterior, reportado por las autoridades chinas
Por último, se suma la situación en EE.UU por el endurecimiento en las políticas fiscales de la Reserva Federal, que mantiene a los economistas en alerta ante una posible recesión.
Según el banco de inversiones americano Goldman Sachs, se espera que la Reserva Federal de los EE.UU suba la tasa de interés durante mayo-junio, pudiendo rebajar la probabilidad de una recesión entre 35% a 25%.
No hay duda que la escasez de demanda y la caída en las tarifas ha generado gran impacto, comprometiendo a su vez las ganancias de los operadores y navieras.
